jueves, 7 de mayo de 2009

La telaraña

Hace días que pienso que cada vez me cuesta más actualizar el blog. Me preguntaba el porqué de este mutismo, esta ausencia de proliferación de palabras, ideas, inquietudes, críticas... que un tiempo atrás fluían sin cesar y, que hoy por hoy, me encuentro perezosa para llevar a cabo. Sequía mental no es, sin ir más lejos, los medios mediáticos me abastecieron la semana pasada con cantidad de jugosa información (malformación) para parir unos cuantas entradas. Pero luego me sentaba frente a mi ordenador y ahí estaba de nuevo: La pereza.

Una de estas noches pasadas, por aquello de mantenerme despierta durante la guardia, mientras no tocan timbres los residentes y compaginando la lectura, pues terrible resulta leer dos miserables lineas y experimentar como el sueño se apodera de uno, pese a gustarle lo que está leyendo, llevé a cabo una de esas acciones que forman parte de las largas listas de tareas pendientes que todos tenemos y, bien por una cosa u otra, siempre acabamos posponiendo en pro a otra más urgente o sencillamente más atractiva. ¡Efecticamente! Lo de hoy era un reto, reorganizar armarios y seleccionar ropa guardada para tirar (Perdón, para reciclar en los contenedores especiales para ropa) que no hace más que acumular polvo y espacio u ordenar el cajón/carpeta/archivador de facturas y recibos se quedan en actividades lúdicas de lo más entretenidas en comparación a esto: Pasar a una agenda todos, y cuando digo todos me refiero a TODOS, los teléfonos que tenía almacenados en mi móvil ¿El motivo? Bueno, este fin de semana pasado a una amiga se le ha perdido su teléfono y con él la posibilidad de establecer contacto con un montón de personas con las que la única forma que tenía de comunicarse era a través de esos números. Así pues, antes de que algo así pueda sucederme, he preferido hacer una copia de seguridad a la antigua usanza y pasarlos a una agenda. A mano.

Cuando terminé, hora y media después, cabe decir que no he clasificado los números por orden alfabético de sus propietarios no, eso sería demasiado fácil y a la vez difícil de recordar pasado el tiempo. Que llegas a la letra T y te encuentra con tres Tonis ni más ni menos, que a saber quien era cada uno, y acabas por llamar a tu antiguo jefe pensando que es tu primo (lejano) “Pashaaa Primo!!!” y no, no mola. He hecho grupos (o etiquetas, rollo blog) que si Familia, Amigos, Escuela, Trabajo... Luego aparte un grupo catalogado como Otros Improbables, improbables de volver a marcar nunca más, y es que son esos números telefónicos que terminamos teniendo sin saber como llegaron hasta ti o porque precisabas en una ocasión en concreto hacer una llamada, o directamente porque no tendrías absolutamente nada que decir ¿Para qué voy a llamar a aquella antigua compañera del colegio con la que, años después de finalizar los estudios, coinicidimos en la misma ciudad durante nuestras respectivas vacaciones y llevadas por la alegría, por no decir la euforia del momento, intercambiamos números?

Una vez concluida la faena rumiaba acerca de las agendas telefónicas que a mis (casi) 35 años he llegado a organizar, y a saber por donde andan. En anteriores ocasiones me preguntaba para qué narices quería yo la columna inútilmente destinada al e-mail si siempre la dejaba vacía, o bien la rellenaba añadiendo el número de móvil, eso quienes tenían. Mientras que, actualmente, es prácticamente imprescindible el correo electrónico, es más, me atrevería a decir que lo que escasean son los números fijos. Si comprobase los números de viejas agendas, e incluso de la presente lista, muchos de ellos serían números fantasmas, inexistentes. Imagino a mi no-nieto, niego pues todavía no existe, ni se si llegaré a tener alguno, encuentra una de mis agendas y decide investigar sobre la vida de su desaparecida abuela, sea por haber fallecido, poniéndonos en el plano melodramático, sea por estar yo en un asilo presa del alzheimer, tirando directamente por lo trágico, y empieza a hacer llamadas. Una tras otra no consigue comunicar absolutamente con nadie. Nada. Ningún rastro con el que poder empezar a desentrañar lo que en su día fue la vida de su abuela, o lo que sería lo mismo, mi propia vida, eliminada por completo como los números que marca, listas de teléfonos que dejaron de tener linea. Sin documentación, sin diarios personales, tal vez algunas fotos sueltas, pero insuficiente para reconstruir una vida, y sin nadie que pueda hablar sobre lo que fui y cuando ya nadie quede para recordarme, será como si jamás hubiera existido. Infinidad de vidas anónimas que no pasaremos a la posteridad, y las que han quedado atrás. En realidad, eso no me preocupa, nunca pretendí dejar legado alguno, con vivir con los menos sobresaltos negativos posibles mientras ande por aquí me doy por satisfecha.

Volviendo al principio del texto, no escribo con tanta frecuencia no porque no tenga nada que contar, siempre hay algo que decir, por imprescindible que sea, tal vez se debe más a la predisposición, las ganas, la pereza, esa que siempre me acompaña. A veces pienso que por mi existencia gris (en apariencia) carezco de experiencias para recurrir a material del qué escribir. Aunque mi vida sea anodina, basta con detenerse ante algo cotidiano y empezar a estirar del hilo. Un hilo a veces, quizás, demasiado largo y carente de interés para quien no teje esta telaraña, o tal vez sí, si has llegado a leer hasta aquí. Intentaré no ser tan perezosa, pero ¡Ay! Cuesta tanto luchar contra la propia naturaleza...

15 comentarios:

EL CHICO GRIS dijo...

Pues con este post si que le has ganado a la pereza. =P

Lo de "Otros Improbables" me suena, creo que yo mismo podría hacer limpia, pero todos tenemos algo de síndrome de Diógenes aunque sólo sea manteniendo números de teléfono en las agendas.

Arual dijo...

Buff yo ya he perdido unos cuantos teléfonos con cada cambio de móvil por ese error de no guardarlos en la tarjeta SIM, y es una pena. Tendré que hacer una copia a la vieja usanza y guardarla a buen recaudo.

El Impenitente dijo...

Para escribir, efectivamente, sólo hay que tener ganas. De la nada siempre sale algo.

Te felicito ya por adelantado por tu cumpleaños.

Los agendas viejas sólo sirven para recordar. Y ya es mucho. Tengo una libreta de direcciones que me resulta muy tierno el ojearla. No voy a volver a escribir a ninguno de aquellos. Pero me encanta ojearla.

Contra la pereza, disciplina. Y ahora me echarás un alegato contra la disciplina.

Te ha quedado muy mono el blog con las reformas hechas.

Besos.

dexter dijo...

A saber dónde me habras metido a mí¡ Firno como anónimo, ayss, de la pereza que me da

SisterBoy dijo...

Hombre yo precisamente ahora no tengo mucho tiempo ni inspiración para escribir de manera que por eso mantengo las secciones fijas porque si estas mucho tiempo sin actualizar la gente deja de pasar (no yo que todos los días recorro mi lista de blogs favoritos religisiomante incluyendo algunos que llevan meses sin actualizarse).

Y en cuanto a las vidas anodinas recuerda esa maldicion oriental "Ojala vivas tiempos interesantes"

JRB dijo...

Lo que tendrás es agotamiento. Un poco de veraneo, dormir, comer bien y verás como te entran ganas de escribir.

Yo soy incapaz de ordenar un armario o de pasar a limpio mi agenda del móvil. Algún día perderé todos los números, seguro.
¿No te pasa que cuando revisas la agenda del móvil no sabes quienes son el 50% de las personas que tienes apuntadas? ¿Y no es un gustazo poder borrar a alguien de tu agenda y de tu vida de un plumazo? Antes también lo era el tacharlos con el boli ensañándote con ellos, pero oye, eso de que desaparezcan de tu vida y de la memoria de tu móvil con solo un click...

PIlar dijo...

Hay muchas cosas que decir porque son muchas las que dices.
YO también perdí mi móvil, es decir, perdí el cargador no se sabe dónde y resulta que a pesar de su juventud, ocho meses, vodafone --la metida del siglo de móvil- ya no hace cargadores. Impresionante. Llevo dos días sin él. Y la cosa es que como tengo tanto trabajo, pues es que no tengo el rato de solucionarlo aunque ya sí me dejé caer con una reclamación.
Tiro de agenda en papel muchas veces, me gustan, se envejecen, se agotan las páginas,se arrugan, eso me gusta, y un día paso el rato maravilloso de repasarlas. Pero claro, los móviles brillan por su ausencia.
Entiendo tu pereza, y lo de los cajones, y lo de ciereto hastío, y el cansancio y tantas cosas que sugieres...por eso te felicito por seguir aquí, porque si nos dejamos comer por mansajes vacíos como los de la prensa, o por tan inmediatos como el facebook -que me seduce y me quita tiempo, vaaya- , si lo hacemos, quizás perdamos algo importante, esto, estar aquí ahora y saber loq ue sí es importante.
UN besazo gordo, gracias

Pareidolia dijo...

Lo de la agenda lo hice hace mucho tiempo, en ese caso el móvil lo perdí yo, pero creo que tú te lo has currado más clasificando por tipo de relación...¿Existencia gris? ¿Ese es el color de tu existencia? Tuve un profesor de arte que no perdía oportunidad hablando de las grandes cualidades del gris. Sea como sea, todas esas ideas se te están organizando en la cabeza, como ese armario del que seleccionas la ropa que vas a reciclar. Tú también te estás reclicando. Tu pereza también tiene derecho a existir!!Un besazo

3'14 dijo...

Gracias a todos.
El Chico Gris, ¿Diógenes? Se queda en poco en comparación conmigo, ahora qu tengo que hacer limpieza de armarios y cambiar la ropa de invierno por la de verano me encuentro guardando más que separando mucha ropa de 3'15 que, para el próximo invierno, estoy segura le quedará pequeña, pero me resisto a deshacerme de ella. Ropa incluso que ni se la he llegado a poner, pues tiene la suerte de tener primos y amigos que se la van pasando, y mira, el niño crece y no llega ni a ponérsela que ya no le cabe, y yo nada, acumulando cajas y más cajas... A ver si este verano reciclo de verdad...

Aru, ahora lo que hay que tener cuidado es con no perder la analógica XD

Impenitente, ¡Gracias! Hoy es el día señalado... ains... camino de los 40 ya :(
Lo del cambio de look del blog es por un cuestión práctica, de esta forma con entrar al mío ya puedo ver de un vistazo quien ha actualizado y ahorrarme el paseillo, el inconveniente es que, se ordena automáticamente por más recién actualizado y claro, se pierde la lista por preferencia.

Una cosa, creo que de la nada realmente no puede salir nada, lo que sucede con esxcribir es que, por más que nos creamos que no tenemos nada por/para contar es falso, siempre hay algo, otra cosa es ponerse un poco a ello o no. Y por descontado, te diré con la cabeza ergida que por más que sepa que lo indispensable es la disciplina, servidora sólo se mueve por impulsos e inspiración momentanea. Y así me va... El día que me aferre a la disciplina quizás empiece a hacer algo productivo...

Dexter, por descontado que te guardo en AMIGOS, ¿Acaso lo dudabas? Claro que dentro de estos habría subgrupos: amigos de la infancia, juventud, del curro, de la red, y aquí uff... podría subdividirse también: cinéfilos, blog, páginas guarras de contactos... XD Pero da igual de donde provengan, ¿No? Si ya son amigos...

Sisterboy, ¡Qué sería de la blogesfera sin tus habituales secciones! He aprendido tanto de secciones como el abecedario del crímen que gracias a ello ya no salgo nunca de casa sin mi spray antivioladores, mi navaja multiusos y ha reforzado aspectos de mi personalidad que creía patológicos, como mi excesivo carácter protector para con mi hijo, y ahora ya lo admito como algo totalmente normal, vamos que ya pongo medidas para que mi hijo no se separe de mi más allá del metro reglamentario. (Que me mire de forma extraña, se esté convirtiendo en un niño altamente introvertido y empiece a vestirse como yo es lo habitual ,¿no?) :D

Respecto a mi vida anodina, a eso me refiero, que prefiero que sea tal y como es a sufrir más de lo que las "vidas corrientes" ya nos deparan... quita, quita...

Vargtimen, Cierto, cierto, sobretodo vacaciones, pero oye, que rindo más (en mis cosas) los días que curro que los que tengo descanso... Debe ser porque ya tengo mi organismo habituado al estrés y si dispongo de tiempo como que me apalanco y no hago nada más.
En cuanto a lo de los números que ni se de quien son es cierto, ¿Y no has llamado preguntando de quien es? Imagina que ese alguien ni te conoce, ni aun diciéndote quien es le reconoces tú tampoco... y... vamos, que empieza a parecer este planteamiento a una peli de la Coixet :P

Pilar, Por suerte no he perdido todavía nunca el móvil, pero si algún día me sucede no se como voy a reaccionar. Si oyes un grito desde tu casa, lugar de trabajo o donde quieras que estés, agonizante y desgarrador, ten por seguro que ese día habrá llegado.
Personalmente no me motiva facebook, un amiga me envío invitación al abrirse cuenta y por cortesía, bueno, porque es una muy buena amiga mía, me abrí una, pero no me llamaba la atención, bastante con mantener cierta regularidad con el blog como para estar pendiente del facebook. No, no. Creo que es una herramienta útil para gente con múltiples interrelaciones, sea por motivos sociales o laborales, o bien entre los adolescentes, que tienen tooooodo el tiempo del mundo para estar ahí dándole sin parar, pero en mi caso, con quien quiero estar en contínuo contacto sólo tengo que descolgar el teléfono, y por eso que casi mejor no perder la agenda ;)
Besos guapa!

Pareidolia, Sí, sí, lo de la extensa gama de grises me lo conozco, pero coño, gris a fin de cuentas, y no me quejo, que conste, si ya me gusta el gris (a ver si ahora vamos a ofender al Chico Gris :P) No se si estoy reciclándome o todavía madurando, je, je... lo que sí te puedo decir es que, esto que empieza a aparecer en mi rostro no son arrugas, son lineas de expresión. Ains... madurando, madurando...
Besazos para ti también!

Canichu, el espía del bar dijo...

yo supongo que estaré en Otros Improbables, siendo sinceros, pero ya te digo que si alguna vez pasas por madrid y te apetece llamar para quedar ya sabes al menos en qué lugar de la agenda estaré.

Pilar dijo...

Y se me olvidó: llevo días acordándome de ti por Antonio Vega. De hecho pasaba por aquí por si habías reaccionado, por si te marcabas un baile. Putada esto de la muerte, de la misma vida cuando atropella. Chinchín, va por él.
Un abrazo

3'14 dijo...

Cabichu, jjajaja ¿Como lo sabes? Pero claro que sí, no dudes que si voy por los madriles te doy un toque. Tú ya sabes por donde ando :)

Pilar, A Antonio Vega le conocía por ser miembro de Nacha Pop y su conocida "Chica de ayer", pero poco más. Lamento su pérdida como la de cualquier otra persona, pues la muerte y el dolor que desprende para los que quedan no es plato de buen gusto para nadie. Parece que cuando los difuntos eran gente conocida como que impresiona más, pero vamos, tampoco tenía mucho más conocimiento sobre él de que te he mencionado. ¿No te estarás confundiendo con Nacho Vegas? Ay, ay, ay... va a ser eso...

3'14 dijo...

ops! sorry Canichu. No es cabichu... en la agenda te tengo bien anotado, eh?? :D

Pilar dijo...

pues va a ser que sí, me confundí, uhyuhyyy

Lena dijo...

Creo que debería entretenerme en eso yo un día de estos también, porque la tecnología falla más que las libretas.

Un besazo guapísima.