miércoles, 16 de septiembre de 2009

Conmovedor y repulsivo

Ayer descubrí una canción de melodía maravillosa, al ser en inglés, y por lo tanto, no entender la letra demasiado, por no decir nada, tecleé el título de la canción en google a ver si aparecía traducida, cosa que suelo hacer habitualmente cuando una canción me gusta. Fue al leer la traducción que me quedé perpleja. ¿Cómo una canción tan preciosa podía ser el relato de la vida de un asesino en serie? Buscando más información fui a parar a una web en la cual había una lista de canciones que hablan sobre psicópatas, etc... Bueno, el cine está plagado de historias basadas en hechos reales que estremecerían incluso a un muerto. Sin ir más lejos, ayer vi la segunda parte de la miniserie de Calparoso “La ira”, que pasaron por televisión, y ya son ganas, porque era malísima, por cierto.
Entonces, ¿Porqué en el universo musical iba a ser distinto? Supongo que lo que me molesta, no es el interés que despierta en muchos tratar de indagar en las mentes de los asesinos, si no la fascinación por él criminal en sí o los crímenes cometidos por estos, que ya es repulsivo. Y es así, ya que personajes como Bonnie y Clyde, los natural born killer de Stone, o el propio Manson se enaltecen entre un determinado público (llego a pensar tan enfermo y sociópata, como los mismos a quienes idolatran).
Está bien que el cine, la literatura, la música... se hagan eco de estas historias, porque son artes que transmiten acontecimientos sucedidos, para bien o para mal, la historia la compone el conjunto de todo, la bondad, la belleza, lo agradable...pero también lo sórdido y perverso. Lo que me repugna, aparte de su existencia tanto extrínseca como intrínseca, pues forma parte de nuestra naturaleza, es un hecho y no debemos eludirlo, es tener que aceptar que haya quienes se recreen y disfruten de las peripecias de una serie de dementes, por llamarlos de alguna manera, pues creo que es cómodo y tranquilizador pretextar locura para unos seres que por inhumanos que puedan parecer, son seres humanos; y vuelvo a lo que me repugna, la naturaleza humana tiene ese lado oculto que tanto me disgusta, irracional, impulsiva, violenta, cruel y sádica. A saber, supongo que la mayoría de todos aquellos que sienten fascinación por determinados criminales, en realidad, esa atracción no deja de ser un mecanismo de defensa para evacuar del cuerpo y la mente, proyectándolo en las experiencias de otros, aquello que en ocasiones se puede llegar a pensar o sentir, pero que el freno de la moral, o para muchos el peso de las consecuencias legales, evita que lleguen a consumar. En fin, otro consuelo más para bobos... La atrocidad existe, la representamos y todos la contemplamos.

Subrayo una frase del final del texto de la canción:

“Y comportándome impecablemente
realmente yo soy como él.
Mira bajo las tablas de la casa
en busca de los secretos que mantengo escondidos.”

A propósito, el tema, es “John Wayne Gacy Jr”, de Sufjan Stevens. Relata la vida del asesino que tiene por nombre el mismo que da título a la canción, se puede leer más en “El ruido de la calle”, un personaje digno de formar parte de la sección de "El abecedario del crímen", del blog de Sisterboy: SisterBoy Drama. Incluído dentro del álbum “Illinois”, publicado en el 2005. No está nada mal, han pasado sólo 4 años hasta que lo he descubierto, bueno, podría haber sido peor, hay infinidad de música más allá de una década que aun desconozco.

9 comentarios:

Mae dijo...

Pues si, es curioso como muchas veces, melodías que suenan genial, tienen letras odiosas...
Por ejemplo, una canción que me encanta es el "come toogether" de los beatles, pero la letra... seguro que iban drogados cuando la escribieron porque no tiene sentido alguno, jajaja.
Igual que los títulos de algunas películas que no tienen sentido, pero bueno...
Mentes asesinas ¿Quien las entiende? pero como dices y con razón, de todo hay, como en botica.
BEsos y ya echaba de menos bucear por aqui.
Te abro link en mi blog, que los perdí todos.
OK?
Adiossss.

SisterBoy dijo...

Psycho killer, qu'est que c'est

La fascinación por los asesinos en serie no deja de ser diferente de la que se sentía antaño por los forajidos del oeste o por los gangsters de la época de la depresión.

Yo supongo que tiene que ver con la total ausencia de barreras morales en la que viven estos individuos y que les convierte en seres humanos brutalmente libres. La falta de empatía y el desprecio por las leyes y las convenciones sociales les deja en libertad para hacer lo que quieran y eso tiene algo de envidiable.

El morbo es un sentimiento como otro cualquiera, los sentimientos no se pueden evitar, sólo puedes sentirlos o no sentirlos. La clave está en reconocerlos como algo pernicioso y mantenerlos en el limbo de la simple curiosidad.

Recuerdo perfectamente leer en los periódicos la noticia de la detención de J.W. Gacy, es un caso interesante porque se trata de la típica historia de Doctor Jeckill y Mister Hyde en la que Hyde acabó rompiendo el equilibrio en detrimiento del buen vecino y ciudadano ejemplar.

El Impenitente dijo...

Pues ya lo ha explicado SisterBoy.

Yo iba a comentar aquello de la fascinación por lo abominable mientras tarareaba "Pedro Navaja" de Rubén Blades.

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida.

Canichu, el espía del bar dijo...

Bueno, las historias suelen mejorar cuando aparece el malo. Es lo que le da sustancia a la trama. Aunque todos, o casi todos, sabemos que no queremos un malo en nuestras vidas.

3'14 dijo...

Entonces, ¿Sin ese morbo/curiosidad añadido a la naturaleza humana creeis que daríamos rienda suelta a nuestros instintos con más facilidad? Sin embargo, se acusa constantemente a la exposición de la violencia en películas, videojuegos, juegos de rol... de ser la causante de propiciar determinados comportamientos psicópatas. Pero por otra parte, el ser sociable es aquel que reprime sus impulsos y maneja sus fantasías sin llegar a realizarlas, sólo las mantiene en el plano imaginario para así evitar que nos matemos los unos a los otros, ¿Es eso? Entonces según esta segunda premisa, la recreación de la violencia no solamente estaría justificada, si no que sería necesaria como canalizador para la supervivencia humana. Uhm... interesante debate, ¿ No creeis?

Bueno, ¿ Y la canción, qué os ha parecido?

SisterBoy dijo...

Yo soy muy partidario de las filosofias que declaran el carácter catarquico de los espectáculos violentos (libros, películas, videojuegos y tal). O al menos a mí me alivian bastante.

La canción un poco indie para mi gusto, yo estoy ahora escuchando música de la época de la Gran Depresión.

Neo dijo...

ajá! eso te pasa por no escuchar más a Muse, como debería hacer todo el mundo al menos una vez cada 4 horas. jajaja
Nos vemos en el concierto? =)

El Impenitente dijo...

Supongo que cada cual tendrá sus canales para desahogarse, canales legales que evitan el ir a la cárcel. También supongo que si pudiéramos ser peores, sin nos dejasen, lo seríamos.

¿La canción? Pues muy tuya.

Pilar dijo...

Yo, 3.14, desde que desde mi más pierna infancia soy forofa de Copola y sus Padrinos, ante los que no admito crítica --qué sabrán ellos de mi mickel--entendí que el peor de los peores puede ser el bueno de la película esta que es la vida. Últimamente vi la nueva versión d e Enemigo Público, donde babeé con ese John Deep abosultamente subnormal diciendo eso de tú eres mi chica a esos primeros planos de la bella --no recuerdo su nombre ni me importa-- chica de mi chico. La verdad es que es un flotador mullido que existan esteroptipos tan abslutamente fáciles de leer, un descanso, una suerte y da sentido a la vida... (glusm, me parece que ahora que empiezo el trabajo yo lo que necesito es vacaciones, oink)
Besos desolées